Una mujer denunció en la Comisaría de Juan Bautista Alberdi que su hijo fue agredido en una plaza y amenazado de muerte por dos sujetos. Horas más tarde, los mismos individuos ingresaron a la vivienda del menor, lo apuntaron con un arma de fuego y lo obligaron a arrodillarse.
Tras la denuncia, la policía inició una investigación y los vecinos identificaron a los agresores como personas que suelen andar armadas e intimidando a la comunidad. El juez penal Rodrigo Sebastián Martearena autorizó el allanamiento de los domicilios de los acusados.
En uno de los allanamientos se encontró una réplica de escopeta de madera, mientras que en el otro se halló una escopeta recortada con dos caños y un cartucho. A pesar de las pruebas encontradas, la Justicia no ordenó la detención de ninguna persona hasta el momento.