La ministra de Seguridad, Patricia Bullrich, enfrenta una creciente ola de críticas y denuncias tras la polémica represión durante una manifestación en el centro porteño. A las acusaciones por el accionar desmedido de las fuerzas de seguridad, se suma ahora la denuncia penal presentada por Beatriz Blanco, la jubilada de 81 años que resultó herida en el operativo.
«Exceso» y «responsabilidad internacional»
El abogado de Blanco, Adrián Albor, confirmó la presentación de la denuncia contra Bullrich y los efectivos involucrados, y calificó el accionar policial como un hecho que «trasciende todos los estándares en materia de derechos humanos». En declaraciones a Radio La 750, Albor advirtió que estos episodios, sumados a otros casos como el de los niños esposados, podrían generar «responsabilidad internacional» para el país.
El calvario de Beatriz Blanco
La jubilada, según relató su abogado, sufrió un prolongado episodio de pérdida de conocimiento, una herida cortante e irritación ocular producto del gas lacrimógeno. Tras ser golpeada, fue trasladada al Hospital Churruca y luego al Hospital Argerich. Albor cuestionó el traslado inicial al Churruca, un hospital policial, y denunció que Blanco no recibió atención allí.
Identificación de los policías, un misterio
Uno de los puntos más controvertidos es la falta de identificación de los efectivos involucrados en la represión. Albor denunció que, a pesar de las imágenes que se viralizaron, aún no se ha identificado al policía que golpeó a la jubilada. Según el abogado, esta falta de identificación forma parte de la estrategia del operativo.
Bullrich bajo la lupa
La ministra Bullrich, quien defendió el accionar de las fuerzas de seguridad, se encuentra ahora en el centro de la polémica. Las denuncias presentadas por Blanco y otras organizaciones de derechos humanos ponen en tela de juicio los protocolos de actuación de las fuerzas de seguridad y el rol de la ministra como responsable política.