La provincia de Tucumán enfrenta una dura realidad socioeconómica, con más de medio millón de personas viviendo en la pobreza, mientras el gobierno provincial aumenta el impuesto inmobiliario en un 78,5% acumulado para 2024.
Según datos recientes del INDEC, el 55,8% de la población del Gran Tucumán-Tafí Viejo vive bajo la línea de pobreza, lo que representa un aumento significativo en los últimos años. La situación es particularmente grave para 152.828 personas que se encuentran en situación de indigencia, sin poder cubrir sus necesidades básicas de alimentación.
Este escenario de crisis social se ve agravado por el aumento de impuestos, como el inmobiliario, que ha experimentado un incremento acumulado del 78,5% para finales de 2024. Esta medida, justificada por el gobierno como una forma de acercar el impuesto al valor real de mercado de las propiedades, representa una carga adicional para los ciudadanos que ya luchan por llegar a fin de mes.
Factores que contribuyen a la pobreza:
Inflación: El aumento de precios, especialmente en alimentos, ha erosionado el poder adquisitivo de los salarios, especialmente para los trabajadores informales.
Salarios estancados: Los salarios no han seguido el ritmo de la inflación, lo que ha llevado a una disminución del poder adquisitivo de la población.
Reducción del poder adquisitivo de los planes sociales: Los programas sociales han perdido valor frente a la inflación, lo que afecta a los sectores más vulnerables.
La situación en Tucumán refleja la difícil realidad que atraviesa gran parte de Argentina, donde la pobreza ha superado el 50% de la población. La combinación de inflación, salarios estancados y aumento de impuestos crea un panorama desafiante para la provincia y sus habitantes.