El gobernador advirtió que Tucumán debe actualizar normas para no perder competitividad y evitar cierres de empresas. “La pata gremial debe estar representada”, enfatizó.
Este miércoles, el gobernador de Tucumán, Osvaldo Jaldo, se refirió en rueda de prensa al debate en torno a la reforma laboral que impulsa el Gobierno nacional y llamó a actuar con “prudencia” frente a los borradores que circulan. “Tenemos que modernizar, pero no resignar derechos adquiridos desde el 45”, sostuvo, al tiempo que remarcó que la discusión debe incluir a todos los sectores.
El mandatario recordó que los proyectos de reforma “todavía no tienen dictamen de comisión”, por lo que consideró innecesario “poner de mal humor a la gente” por debates que aún no ingresaron formalmente al Congreso. “Son expresiones de anhelos convertidas en proyectos de ley que el Gobierno nacional entiende que puede transformar en ley, siempre y cuando Diputados y Senadores los aprueben”, explicó.
Competitividad y riesgos para la producción tucumana
Jaldo reconoció que cualquier modificación en materia laboral genera inquietud, pero insistió en que los cambios que permitan mejorar la competitividad deben evaluarse con responsabilidad. “Hoy tenemos una economía globalizada. Tucumán tiene casi 160 empresas y 150 productos en distintos mercados del mundo”, afirmó.
Como ejemplo mencionó la producción de arándanos, señalando que países vecinos como Perú ingresan antes a Estados Unidos con costos más bajos, lo que pone en riesgo la continuidad de una actividad que emplea a más de 30.000 tucumanos y tucumanas. También se refirió a la situación de la frutilla, la palta y el limón.
“Si no readecuamos cuestiones tributarias y de costos, no vamos a poder competir con países como Sudáfrica, que inundó de limones el mundo. Y si perdemos competitividad, vamos a perder 40.000 fuentes de trabajo de la actividad citrícola”, alertó.
“Modernizar no es resignar derechos”
El gobernador remarcó que la discusión no puede reducirse a una confrontación ideológica. “Tenemos que modernizar la provincia y el país. Eso no significa resignar derechos adquiridos desde el 45 ni malinterpretar el debate”, afirmó.
Jaldo subrayó que sostener leyes antiguas sin actualizarlas dificulta competir “ni con el país vecino ni con el limítrofe”, lo que puede derivar en pérdida de mercados y puestos laborales.
Gremios y consensos necesarios
El mandatario confirmó que mantiene diálogo con distintos gremios y que varios de ellos ya participaron en la elaboración de borradores que se analizan a nivel nacional. “La pata gremial debe estar representada, junto al Gobierno nacional y al Congreso. Sin acuerdos, Argentina seguirá dos años más sin presupuesto y con vetos”, advirtió.
Señales de alerta en la economía
Jaldo también mencionó síntomas de preocupación en varios sectores productivos: “Las textiles adelantan vacaciones, reducen horas de trabajo; Scania para cada 20 días. Algo no está andando bien en el país”.
Frente a ese panorama, insistió en la urgencia de actualizar normas y leyes para evitar el cierre de empresas y proteger el empleo. “Si no, vamos a bajar muchas persianas en la Argentina y vamos a dejar mucha gente sin trabajo”, concluyó.