En el Día de los Fieles Difuntos, Noticiasdelinterior.com.ar recorre las historias que laten en el cementerio local de Juan Bautista Alberdi. Entre ellas, destaca la del monumento a «La Negrita Hallada», un sitio de profunda devoción popular.
Juan «Riñón» Carlos Campos, reconocido comerciante de la ciudad y fiel devoto de la Negrita Hallada, compartió con nosotros la historia que le transmitieron desde su infancia. Según relata, la Negrita Hallada era una niña que falleció en el hospital, abandonada a su suerte. Su espíritu, sin embargo, no encontró descanso y comenzó a aparecer en diferentes lugares del cementerio.
Campos cuenta que desde pequeño acudía a la Negrita Hallada para pedirle milagros por diversas dolencias, y siempre encontraba alivio a sus males. Con el tiempo, la imagen de la niña se materializó en un pequeño nicho donde la gente dejaba velas. Lamentablemente, el nicho se incendió en dos ocasiones, pero Campos rescató los restos y reconstruyó el espacio.
Movido por su fe, Campos construyó un nuevo nicho en su propia casa, pero su familia, preocupada por la presencia de los restos, los trasladó al cementerio mientras él se encontraba en el Mundial de Sudáfrica. A su regreso del Mundial de Rusia, Campos, cumpliendo una promesa, erigió el imponente monumento que hoy se puede observar en el cementerio, una estructura diseñada para proteger la imagen de la Negrita Hallada del fuego.
Campos continúa visitando a la Negrita Hallada, rezando por las necesidades de la comunidad y adornando el monumento con recuerdos de sus viajes, como la Virgen del Río de Janeiro. La historia de la Negrita Hallada y la devoción de Campos se ha convertido en un fenómeno local, atrayendo a numerosos fieles que buscan consuelo y milagros.
Si bien la versión de Campos es la más conocida, existen otras versiones sobre el origen de la Negrita Hallada.
Un misterio sin resolver:
Además de la Negrita Hallada, el cementerio alberga otro misterio que despierta curiosidad y temor entre los visitantes. No se sabe de quien es la tumba, ubicada en la sección A 1 54. Lo peculiar de esta tumba es la frase grabada en su lápida: «Oh tu mortal: seas quien quieres. Yo fui lo que tu eres. No hay edad prefijada talvez. Serás tu lo que soy… ¿que te importa mi nombre tan siquiera? aquí yace quien te espera».
La responsable de esa tumba es Delgado Maria, quien falleció hace años, pero de quienes son los restos y la enigmática frase permanecen desconocidos. Algunos creen que se trata de una advertencia o una forma de infundir miedo, mientras que otros aseguran que la tumba se ha convertido en un lugar de peregrinaje donde la gente deja flores y pide favores, como si se tratara de un alma milagrosa.
Noticiasdelinterior.com.ar invita a sus lectores a compartir sus propias historias y perspectivas sobre esta figura que despierta tanta fe en la comunidad de Juan Bautista Alberdi o historias propias.