Luego de ser detenido en Perú, “Pequeño J” negó ser el autor del triple crimen en Florencio Varela

El joven narco, identificado como Tony Janzen Valverde Victoriano, fue capturado en un operativo conjunto entre la Policía Nacional del Perú y fuerzas de seguridad bonaerenses. Tras su arresto, se desligó del asesinato de Brenda del Castillo, Morena Verdi y Lara Gutiérrez.

La Justicia confirmó este martes la detención en Perú de Tony Janzen Valverde Victoriano, alias “Pequeño J”, el presunto autor intelectual del triple femicidio narco en Florencio Varela, que tuvo como víctimas a Brenda del Castillo (20), Morena Verdi (20) y Lara Gutiérrez (15).

El acusado, de apenas 20 años, fue interceptado en un camión que se dirigía a la ciudad de Pucusana, al sur de Lima, cuando intentaba escapar. El procedimiento fue el resultado de un operativo coordinado entre la Policía Nacional del Perú y efectivos de la Provincia de Buenos Aires, tras un pedido de captura nacional e internacional emitido el viernes pasado.

La primera reacción de “Pequeño J”

El traslado del detenido hasta Lima fue cubierto por la señal local Latina Noticias, que mostró las imágenes de su llegada, custodiado por un fuerte despliegue policial. Ante las cámaras, Valverde Victoriano lanzó una frase que buscó desligarlo de la acusación:

“Me echaron la culpa nomás, nosotros no matamos a nadie”.

En otro tramo, insistió:

“Hay que encontrar al culpable, yo no tuve nada que ver”.

Pese a su intento de desvincularse, las pruebas recolectadas por la investigación apuntan a él como el cerebro del crimen.

Quién es “Pequeño J”

Nacido en La Libertad, Perú, Valverde Victoriano es descrito por los investigadores como un delincuente joven, brutal y sin códigos, con una reputación temida dentro del mundo narco. Se lo acusa de planear la trampa para atraer a las tres chicas desde La Matanza hasta una vivienda en Florencio Varela, donde fueron torturadas, asesinadas y descuartizadas.

Según la hipótesis judicial, el crimen fue ordenado como mensaje mafioso y ejecutado con una modalidad inédita: la transmisión en vivo a través de un grupo cerrado de Instagram, en la que se mostraron las torturas y el asesinato.

Un legado criminal

El apodo “Pequeño J” lo heredó de su padre, Janhzen Valverde, integrante de la banda criminal “Los Injertos de Nuevo Jerusalén”, con base en el distrito La Esperanza de Trujillo. En 2018, su padre fue asesinado en un ajuste de cuentas.

La investigación de aquel homicidio reveló que fue ejecutado por Wilder Lara Chávez, miembro de la organización rival “La Jauría”, en venganza por la muerte de su cuñado, Santos López Guevara, integrante de “El Gran Marqués”. De esa forma, Tony creció marcado por la violencia, en un entorno dominado por bandas, venganzas y códigos narcos.

Lo que viene

La captura de “Pequeño J” representa un golpe clave para la causa que investiga el triple femicidio en Florencio Varela. Las autoridades ahora trabajan en los trámites de extradición a la Argentina para que responda ante la Justicia bonaerense.

Mientras tanto, la fiscalía especializada en Homicidios, a cargo de Carlos Adrián Arribas, continúa reuniendo pruebas y testimonios para sostener la acusación contra quien consideran el autor intelectual de uno de los crímenes más conmocionantes de los últimos años en el país.