Javier Milei recibirá al canciller israelí Eli Cohen y un grupo de familiares de secuestrados por el grupo terrorista Hamas, que están cautivos en los túneles secretos de Gaza. La reunión del presidente electo con el ministro de Relaciones Exteriores y los parientes de los cautivos en la Franja, que llegaron desde Tel Aviv para participar de la asunción presidencial, exhibe la preocupación del futuro gobierno respecto a los secuestrados por la organización fundamentalista y la agenda de terror que ejecuta Irán a nivel global.
Junto al canciller Cohen y al embajador de Israel en Argentina, Eyai Sela, estará Maurice Shnaider, tío de Shiri Bibas y tío abuelo de Kfir y Ariel Bibas, que fueron secuestrados en el kibutz Nir Oz y que Hamas ha sostenido que están muertos. Además participará Maia Chmiel, prima de Yair y Eitan Horn, también capturados por el grupo terrorista en Nir Oz y Kfar Saba.
Asimismo, el presidente electo recibirá a Guefen Sigal-Ilan, sobrina de Fernando Marman, que fue secuestrado en el Nir Itzhak. La pareja de la madre de Guefen Sigal-Ilan, Luis Har, tiene destino desconocido tras ser capturado en el kibutz de Nir Itzhak.
Milei también escuchará los testimonios de Hen Mahluf (Nisenbaum), hija de Michel Nisenbaum, y Mary Shohat, hermana de Michel Nisenbaum, que vivía en Sderot, uno de los barrios invadidos por Hamas el 7 de octubre.
Al lado del futuro mandatario se encontrará Diana Mondino, próxima ministra de Relaciones Exteriores. Mondino jugará un rol clave para lograr que Hamas libere a los rehenes argentinos que están en Gaza. El Emirato de Qatar negocia con Hamas -también protege a sus terroristas en Doha- y allí Mondino ha puesto su atención.
En los túneles de Gaza se encuentran aún 138 secuestrados -cifra oficial- y Hamas impuso ciertas condiciones que han hecho fracasar las últimas negociaciones para establecer un nuevo cese del fuego y acordar la libertad de los civiles secuestrados a cambio de prisioneros palestinos condenados o acusados en Israel por actos terroristas.
Milei y Mondino se encontrarán con la compleja tarea de liderar una negociación que incluye a Qatar, Hamas, Egipto, Estados Unidos e Israel. El método para obtener la libertad de los rehenes inicia en el Emirato de Qatar, continúa con el grupo terrorista y concluye con la participación activa de la Casa Blanca.
El presidente y su canciller ya asumieron que se trata de caminar a oscuras por un laberinto que Hamas construyó para satisfacer su propia estrategia de defensa de la Franja. A la organización terrorista no le importa la vida de los cautivos: aprovecha la ocasión para sacar ventaja en una guerra que desató con el ataque del 7 de octubre.
El 7 de octubre, Hamas irrumpió en territorio israelí cometiendo un acto de terrorismo que causó más de 1.200 muertos, cientos de torturados, mutilados y violados. Asimismo, la organización fundamentalista financiada por Irán secuestró -al menos- a 240 civiles que mantuvo cautivos en los túneles de Gaza.
Tras sucesivas semanas de combate en la Franja, Hamas negoció un cese del fuego y aceptó intercambiar rehenes israelíes por presos palestinos acusados y condenados por actos terroristas. También Hamas exigió que se permita la entrada de alimentos y medicamentos para los palestinos que habían quedado atrapados en la zona de conflicto.
Al final, esa “ayuda humanitaria” fue utilizada por la propia organización fundamentalista, que maneja los hospitales de Gaza.
Milei recibe al canciller Cohen para ratificar su condena al acto terrorista cometido por Hamas contra Israel. El presidente tiene pensado viajar a Jerusalén y Tel Aviv, y ya ha anunciado que incluirá a Hamas en la lista de organizaciones terroristas que también integra Hezbollah, responsable de los atentados a la embajada israelí en Buenos Aires y a la AMIA.
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