Indignación y desesperación se viven en las puertas del sanatorio Luz Médica, ubicado en pleno centro de la capital tucumana. Familiares de pacientes y afiliados al PAMI protestan enérgicamente tras la sorpresiva decisión del Programa de Atención Médica Integral de rescindir el contrato con la institución, dejando a 17.000 jubilados sin cobertura médica.
«¡Es una vergüenza, un abandono de persona!», claman los adultos mayores que se concentran frente al sanatorio. La noticia cayó como un balde de agua fría: turnos cancelados, servicios paralizados e incertidumbre sobre el futuro de los pacientes internados, algunos de ellos en terapia intensiva.
«Tenía turno para hoy y me encuentro con esto», se lamenta Roberto Villalva, uno de los tantos afectados. Lourdes Gallardo, con su padre internado en terapia intensiva, expresa su angustia: «Nos dijeron que tendríamos que buscar un hospital público o pagar como particular. ¿Dónde está la plata que aportamos toda la vida?».
La indignación se mezcla con la bronca. «¿A dónde va la plata del PAMI?», cuestiona Marisa, con su madre en terapia intensiva. «Que le paguen a Luz Médica, no tenemos dónde llevar a nuestros familiares».
Según la resolución del PAMI, la decisión se debe a incumplimientos contractuales por parte del sanatorio. Sin embargo, los afiliados defienden la calidad de la atención recibida en Luz Médica y denuncian que el PAMI les adeuda pagos desde hace cuatro meses.
Fuente del diario El Tucumano