En una trágica madrugada de sábado, la ciudad de Santiago del Estero se vio sacudida por un brutal asesinato que segó la vida de un joven de tan solo 13 años. El hecho ocurrió en la intersección de las calles Canal Revestido y avenida Besares, en el barrio Los Álamos II de la localidad de La Banda.
La víctima, identificada como Benjamín Gómez, caminaba junto a un grupo de amigos cuando fueron interceptados por otro grupo de jóvenes. Tras una discusión, uno de los agresores, un adolescente de 15 años, extrajo un arma de fuego y disparó a corta distancia contra Benjamín, quien cayó al suelo gravemente herido.
Pero la brutalidad no terminó ahí. Los agresores, no conformes con el disparo, propinaron una paliza a la víctima mientras yacía indefensa en el suelo, para luego huir corriendo del lugar.
Gracias al rápido accionar de la policía y al relato de los testigos, se logró detener al presunto autor del disparo en la casa de un amigo, ubicada en el barrio Villa Inés. Además, se secuestró el arma utilizada en el crimen, un arma casera conocida como «tumbera».
La causa quedó a cargo de la fiscal de Delitos Comunes, María Montes, quien trabaja intensamente para esclarecer los motivos de este aberrante hecho. Si bien las primeras hipótesis apuntan a un problema de vieja data entre los jóvenes, aún no se descarta ninguna línea de investigación.
«Es muy lamentable la pérdida que estamos teniendo, en un lugar donde es tierra de nadie», expresó Oriana, familiar de la víctima, en diálogo con Noticiero 7. «Allí es muy peligroso, los chicos están amenazados. Si alguien lleva una gorra o es de otro barrio, ya es motivo de agresión», agregó.
Con el dolor a flor de piel, Oriana recordó a Benjamín como un niño bueno, amoroso y respetuoso, querido por toda la familia. «Lo que le pasó a él, le puede pasar a cualquiera», lamentó.