La ciudad de San Salvador de Jujuy se vio conmocionada por un hecho de extrema violencia ocurrido en el barrio El Chingo. Un joven de 19 años asesinó a su madre, escondió el cuerpo y, tras intentar incendiar la vivienda para borrar evidencias, se quitó la vida arrojándose desde un puente.
El caso se descubrió el martes, cuando vecinos alertaron a las autoridades por un principio de incendio en una casa ubicada cerca del río Grande. Al ingresar al lugar, notaron que el joven escapaba en un vehículo. El fuego fue controlado rápidamente y no llegó a propagarse.
Minutos más tarde, testigos vieron cómo el mismo joven estrellaba su Ford Focus contra la baranda del puente San Martín y se lanzaba al vacío. Pese a ser trasladado de urgencia al Hospital Pablo Soria, falleció pocas horas después.
Mientras tanto, efectivos policiales que acudieron al domicilio hallaron el cuerpo de su madre, de unos 60 años, envuelto en una frazada y con signos de descomposición avanzada. La autopsia reveló múltiples heridas de arma blanca en el rostro, cuello, cabeza y tórax, y estimó que la muerte se produjo entre 10 y 14 días antes del hallazgo.
El fiscal a cargo de la investigación, Diego Cussel, confirmó que se trata de un parricidio seguido de suicidio. “La mujer presentaba lesiones compatibles con un ataque con arma blanca, y todo indica que su hijo intentó ocultar el crimen y luego decidió quitarse la vida”, explicó el funcionario judicial en declaraciones a Canal 7 de Jujuy.
En el domicilio se secuestraron varios elementos de interés, entre ellos dispositivos electrónicos y cuchillos que serán sometidos a peritajes. Si se confirma la hipótesis principal, la causa se cerrará por la muerte del autor del hecho.