El Ministerio Fiscal solicitó la prórroga de la prisión preventiva que viene cumpliendo “Catucho” Cruz, imputado por el homicidio de Silvio Cabrera, quien en febrero de este año fue encontrado muerto dentro de su auto en El Mollar. La víctima recibió cuatro disparos en la cabeza.
La Unidad Fiscal de Investigación de Delitos contra la Integridad Física de Monteros, a cargo de Mónica García de Targa, convocó a una audiencia a los fines de solicitar la prórroga de la prisión preventiva que viene cumpliendo José Antonio “Catucho” Cruz (25), principal sospechoso del homicidio de Silvio Marcelo Cabrera (48). El 13 de febrero pasado, el remisero había salido de su casa, en Lules, para realizar un viaje hasta Tafí del Valle, pero no regresó. Horas más tarde lo encontraron muerto de varios disparos en la ruta 325, kilometro 12, en Las Carreras. Su cuerpo estaba junto a su auto incendiado.
Por ese hecho, Cruz se encuentra imputado como presunto autor del delito de homicidio doblemente agravado por alevosía y por el uso de arma de fuego, en concurso real con el delito de hurto agravado, ya que en procura de su huida había robado una motocicleta a un lugareño.
Durante la audiencia, el auxiliar de fiscal, Bernardo Sassi, requirió que la medida privativa de la libertad que pesa sobre el acusado desde el inicio de la causa se extienda por cuatro meses más. Asimismo, pidió la prórroga de la Investigación Penal Preparatoria, cuyo plazo se vence la semana próxima. En ese sentido, fundamentó la necesidad extender los plazos procesales en virtud de que falta el procesamiento de una prueba de ADN que está a cargo del laboratorio de química legal del ECIF. “Aguardamos una comparativa de una prenda de vestir que tenía Cruz al momento de su detención, una remera que tenía mancha de sangre que ya sabemos que es sangre humana. La misma debe cotejarse con muestras tomadas de la víctima Cabrera y el resultado va a demorar aproximadamente 40 días”, sostuvo el representante del MPF. Asimismo, informó que días atrás se realizó un allanamiento en el lugar de detención del imputado, donde se secuestró un teléfono celular.
“Se mantienen los riesgos procesales de fuga y, sobre todo, del entorpecimiento de la investigación, ya que podría amedrentar a testigos”, añadió el investigador a la hora de solicitar que “Catucho” permanezca encerrado.
Por otro lado, desde la fiscalía señalaron que una vez que esté el resultado del ADN, se formulará el requerimiento de elevación a juicio cuya pretensión punitiva será la prisión perpetua.
En su resolución, el juez interviniente hizo lugar al requerimiento fiscal en su totalidad.
La teoría del caso
El lunes 13 de febrero de 2023, la víctima había salido a trabajar en su auto alrededor de las 5:00 de la mañana. Alrededor de las 6:00, el imputado Cruz habría llamado a la remisería donde trabajaba. Cabrera tomó el viaje y lo trasladó desde Lules hasta Tafí del Valle.
Alrededor de las 8:00 horas, «Catucho», desde el asiento trasero del Wolkswagen Suran, ejecutó a Cabrera con un arma que sacó de su mochila. La víctima recibió cuatro disparos, tres que ingresaron por la nuca y uno a la altura del maxilar.
Luego le prendió fuego al vehículo que fue consumido por las llamas y huyó del lugar a pie. Momentos después habría robado la motocicleta en la que pretendía escapar, propiedad de un hombre que estaba trabajando en el paraje conocido como El Rincón y que la había dejado estacionada en la calle con la llave puesta. Alrededor de las 15.00 horas de ese día, fue atrapado por la policía que lo divisó en ese mismo rodado.