En el país cada 1° de diciembre vuelve a ponerse en agenda un problema que persiste a pesar de los avances médicos: la transmisión vertical del VIH, es decir, cuando el virus pasa de una persona gestante al bebé durante el embarazo, el parto o la lactancia. Aunque Argentina cuenta con tratamientos gratuitos y protocolos claros, los casos siguen apareciendo cada año.
- Fiebre y escalofríos
- Dolor de cabeza
- Fatiga o cansancio
- Dolor de garganta y/o llagas en la boca
- Ganglios linfáticos inflamados
- Erupción cutánea
- Dolor muscular o articular
- Sudoración nocturna
- Diarrea
- Pérdida de peso
- Etapa crónica: Después de la infección aguda, el VIH puede no causar síntomas durante años. Algunas personas pueden tener síntomas leves.
- Etapa de SIDA: La etapa más avanzada, el SIDA, puede comenzar después de 8 a 10 años sin tratamiento y se caracteriza por síntomas como pérdida de peso extrema, fiebre, fatiga extrema, diarrea, y la aparición de infecciones oportunistas como neumonía.
Por qué siguen ocurriendo casos
Según especialistas, la mayoría de las transmisiones verticales se producen por situaciones prevenibles:
- Diagnóstico tardío o ausencia de controles prenatales, lo que impide iniciar el tratamiento a tiempo.
- Interrupciones en el acceso a la medicación, especialmente en personas que no continúan el seguimiento o no reciben asistencia adecuada.
- Falta de testeo temprano, tanto en el embarazo como en el momento del parto.
- Desconocimiento sobre la importancia de evitar la lactancia materna cuando la persona tiene VIH detectable o no tratada.
Cómo pueden evitarse
La transmisión vertical es prácticamente evitable cuando se cumplen los protocolos:
- Test rápido y gratuito durante el embarazo: detectar a tiempo permite iniciar tratamiento inmediato.
- Terapia antirretroviral: si la persona gestante tiene carga viral indetectable, el riesgo de transmisión es mínimo.
- Controles prenatales regulares para ajustar medicación y monitorear la carga viral.
- Parto y manejo hospitalario adecuados, según cada caso.
- Elección segura de la alimentación del bebé, evitando la lactancia cuando corresponde.
Organizaciones comunitarias y equipos sanitarios remarcan que la clave es simple: diagnóstico temprano, tratamiento sostenido y acompañamiento adecuado. En este Día Mundial de la Lucha contra el VIH, el llamado es claro: con acceso a controles y medicación, ningún bebé debería nacer con el virus en Argentina.
